Entrevista a Anne-Marie Boulay
Anne-Marie Boulay es investigadora post-doctoral, experta en Análisis de Ciclo de Vida (ACV) y huella hídrica. Actualmente es la representante canadiense para el desarrollo del estándar ISO Water Footprinting y Project Manager del proyecto WULCA, donde coordina la línea de trabajo científico que busca lograr un método armonizado para evaluar el uso del agua en ACV.
En su visita al espacio CREA (Centro de Recursos del Agua), Anne Marie Boulay explicó los retos en el concepto huella hídrica.
CREA: ¿Qué es WULCA y en qué actividades estáis trabajando?
Anne Marie Boulay: WULCA se fundó en 2007, bajo los auspicios de la Iniciativa de Ciclos Vitales de la UNEP, con el objetivo de integrar los posibles impactos del uso del agua, especialmente desde el punto de vista del consumo de agua. Así que primero se dotó a la organización de una infraestructura, y a partir de ahí se empezó a trabajar con distintos métodos y distintos autores, comparándolos cualitativa y cuantitativamente para entender bien los principios y diferencias de cada uno de ellos.
El objetivo de fondo siempre ha sido encontrar una metodología basada en el consenso, y ahora, después de 10 años, por fin lo hemos conseguido. Gracias al lanzamiento el pasado año del metodo AWARE, un método basado en el consenso para evaluar los indicadores de escasez de agua.
El concepto de la huella de la disponibilidad del agua (Water availability footprint concept)
La escasez de agua realmente sólo mira los aspectos cuantitativos del agua, cuánta de esta agua se consume localmente, o se necesita en otros ecosistemas, pero la huella de la disponibilidad del agua es un concepto algo más amplio, en el que la disponibilidad se puede reducir, no sólo porque se consume agua, sino también porque su calidad se ha degradado.
De esta forma, el agua puede que esté ahí, pero la calidad es tan baja que, en realidad, no está disponible para los consumidores locales, a menos que sea sometida a un tratamiento adicional. Esto es el concepto de disponibilidad real, que incluye el aspecto de la calidad del agua, pero es independiente de los caminos concretos de impacto de eutrofización, acidificación, toxicidad humana, ecotoxicidad...que realmente cuantifican el impacto potencial de la polución en el ecosistema o en la salud humana.
¿Qué refleja la escasez de agua?
Hay agua abundante si lo miramos en términos absolutos, el problema es que no está distribuida equitativamente por el mundo, ni en cuanto a tiempo ni en cuanto a espacio. Además, no siempre se ajusta a los sitios donde vive la gente o donde la gente necesita usar agua.
La escasez de agua refleja la diferencia entre la disponibilidad de agua y cuánta agua se necesita en esa zona, tanto para el consumo humano como para el de los ecosistemas. Ver la huella de la disponibilidad del agua nos permite calibrar el nivel real de escasez o qué presiones hay sobre este recurso alrededor del planeta y en distintas épocas del año.
¿Cómo pueden las empresas españolas reducir su huella hídrica?
La inversión puede ser la forma más eficiente de reducir la huella de escasez de agua. También puede implicar cambiar de ubicación una operación concreta, puede ser invertir en tecnologías específicas, pero sólo en los sitios donde realmente marca una diferencia en términos de huella de escasez de agua. También puede ser la adaptación de una producción en una región en concreto, para que se adapte y tenga un menor impacto final en la disponibilidad de agua.
También da una buena idea conocer toda la cadena de suministro, quizá las empresas españolas pueden sorprenderse de que la mayor huella de escasez de agua no necesariamente tiene lugar en España, puede tener lugar en otro sitio. El conocimiento de la cadena de suministro nos da una información eficaz a la hora de conocer la huella de escasez de agua de una organización y es un importante a la hora de identificar los principales puntos negros en este aspecto, haciendo más eficiente el proceso de reducción de la huella hídrica.
¿Qué pueden hacer los consumidores para reducir su huella de escasez de agua?
Lo que comemos es, sin duda, uno de los factores más importantes. Como nos podemos imaginar, una dieta con productos de origen animal tiene normalmente una huella hídrica mayor, porque el animal debe ser alimentado con grano (pienso) que, a su vez, acostumbra a ser irrigado.
Claro que la forma de producir carne puede cambiar mucho según la región, pero ser consciente de dónde viene tu alimentación, de cómo se ha producido tu comida, será tu primer paso hacia la reducción de tu huella hídrica. Igual con el consumo energético, que es el otro gran factor en esta huella, tanto por la energía consumida en el hogar como en el transporte.
Más información: https://www.espaciocrea.net/