DAM adquiere la categoría Silver de EsAgua tras el cálculo y verificación de la huella hídrica en EDAR
Depuración de Aguas del mediterráneo (DAM) se ha convertido en una de las primeras empresas en realizar el cálculo de la huella hídrica en estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR). Atendiendo a los avances de la empresa en el cálculo y verificación de la huella hídrica, la Red EsAgua ha otorgado a DAM la Categoría Silver, un reconocimiento para aquellas entidades participantes de la Red EsAgua que hayan calculado y verificado su huella hídrica.
La verificación fue realizada el pasado mes de junio en una EDAR ubicada en Alzira (Valencia) por la empresa DNV·GL, entidad colaboradora de EsAgua, según la metodología descrita en la norma de la Water Footprint Network y también el estándar de la ISO14046 referente a la gestión ambiental y huella de agua.
"En el caso de las EDARs, la huella hídrica permite conocer los impactos que se generan en esta actividad sobre indicadores como la escasez de agua y la eutrofización"
La huella hídrica como indicador medioambiental define el volumen total de agua dulce utilizado para producir los bienes y servicios que habitualmente consumimos. En el caso de las EDARs, la huella hídrica permite conocer los impactos que se generan en esta actividad sobre indicadores como la escasez de agua y la eutrofización.
Para determinar los flujos de agua en la EDAR se han tenido en cuenta las aportaciones o consumos directos e indirectos y se han clasificado según la WFN en huella hídrica azul, huella hídrica verde y huella hídrica gris. Las operaciones unitarias tenidas en cuenta en la EDAR evaluada y que representan un aporte significativo en términos de huella hídrica azul, verde o gris son las siguientes:
- Evaporación.
- Zonas de riego.
- Energía consumida: combustibles.
- Reactivos.
- Tratamiento de fangos.
- Fracción húmeda del fango.
- Subproductos agroalimentarios para codigestión.
- Torres de desodorización.
- Lavado de elementos de protección.
Los resultados obtenidos indican que en el río más próximo a la EDAR las variables más críticas como son el oxígeno disuelto, la demanda biológica de oxígeno (DBO), el nitrógeno total (Nt), el amonio (NH4) y el ortofosfato (PO4) cumplen con los límites establecidos por la Directiva Marco del Agua (Directiva 2000/60/CE). De todos estos, el nitrógeno total es el más problemático pues, además de ser el que más se acerca al límite aceptable, es el que mayor huella hídrica gris genera, siendo también uno de los parámetros limitantes a la hora de evaluar el impacto debido a la eutrofización.
Tal y como se indica en el estudio, la calidad del efluente de la EDAR evaluada en cuanto a la carga orgánica, amoniacal y de fósforo puede clasificarse en general como “muy buena”, lo que contribuye a la mejora de los medios receptores y la disponibilidad del recurso hídrico en el cauce receptor, contribuyendo así a disminuir los problemas de escasez de agua.
Un aspecto interesante derivado del cálculo de la huella hídrica en la EDAR es que son necesarios 14.890 litros de agua libre de contaminantes (tomando como parámetro de referencia el nitrógeno total) para diluir el efecto de 1 m3 de agua residual urbana en el caso de que la EDAR no existiera. Es decir la huella hídrica asociada al proceso de depuración tendría un impacto mayor en el caso en el que las instalaciones de depuración no existieran.
De esta forma, la empresa DAM ratifica su gran compromiso con el medio ambiente y con la lucha contra la escasez de agua, considerando que el tratamiento de agua residual y su reutilización son aspectos claves en la gestión del agua.
Más información en https://www.dam-aguas.es/
